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Restaurante italiano Paladini
Lunes, 28 de Mayo de 2007
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Fuente: Hosteleriasalamanca.es
Por Eva González
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El Paladini vio la luz a principios de los años 80, por aquel entonces era uno de los primeros restaurantes italianos que abrían en la ciudad y para los salmantinos fue toda una novedad. Su inmejorable enclave: en plena Rúa Mayor, no ayudó demasiado en un principio pues según nos cuenta su primer dueño Ramón, “la Rúa apenas estaba arreglada, prácticamente era una calle que daba paso al barrio chino”, un distrito que en la actualidad ha desaparecido del mapa urbano casi en su totalidad. Dcha: Comedor del Paladini |
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A medida que los años pasaban, Salamanca se iba poniendo cada vez más guapa: sus calles se asfaltaban, las fachadas de sus edificios se restauraban y surgían coquetas plazas arboladas que cambiaban el paisaje del centro de la ciudad. Del mismo modo, la Rúa fue sufriendo una progresiva evolución que la coronó hasta lo que es hoy en día, una transitadísima vía que nace en la Iglesia de San Marín y que muere en la mismísima Catedral. Una calle de gran belleza que ofrece al paseante una tractiva oferta gastronómica en los locales de restauración que la flanquean. El Paladini es uno de ellos. Un lugar escondido en los bajos de un edificio pero que aguarda una estancia acogedora y una atmósfera absolutamente romántica.
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Con una decoración mediterránea en el que predomina el blanco, la estructura del comedor reproduce el de una caverna; con techos redondeados, como excavados en la piedra y grandes orificios en sus muros que comunican los diferentes espacios. Decenas de velitas iluminan la estancia, en cuyas paredes reposan una colección de portadas de partituras centenarias y numerosas instantáneas de lo que fue el “salmantino del año” durante más de una década. Este certamen, que seguro muchos de ustedes recordarán, se celebraba cada año en el restaurante, en él se galardonaba al salmantino que había sobresalido en cualquiera de los ámbitos más allá de las fronteras de nuestra provincia. |
Prestigiosos personajes como Sebastián Bataner, Benancio Blanco, Julio Fermoso o "El Niño de la Capea" sonríen a la cámara y parece como si nos espiasen desde la distancia...
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Siguiendo un estilo culinario “libre” que no se ajusta parámetros concretos y que se reinventa periódicamente, cada plato es resultado del atrevimiento y valentía de sus dueños que deciden la oferta siguiendo los dictámenes de la imaginación. Su carta da protagonismo a las pizzas y los platos de pasta, lo más característico de la gastronomía del país vecino, sin embargo las fondees y los carpaccios son especialmente recomendados. No obstante, el Paladini también quiere dar cabida a gustos clásicos con creaciones más tradicionales como el cochinillo asado o la parrillada de marisco, elaborados en el restaurante vecino, el Churrasco, que también pertenece al mismo dueño. |
 Lasaña de carne |
Los postres caseros entre ellos la fondee de chocolate, a base de pedacitos de frutas que se bañan en el chocolate caliente, son también una especialidad del lugar.
La terraza es sin duda lo mejor de este restaurante, una instalación abierta al público desde marzo hasta octubre y que permite deleitarse al anochecer con la majestuosa imagen de la catedral acertadamente iluminada. Al otro lado de la misma, la Iglesia de San Martín, también una bonita estampa de la arquitectura salmantina. Y rodeando la terraza por sus extremos cientos de paseantes que observan con curiosidad el panorama gastronómico que la clientela del Paladini muestra sobre sus acogedoras mesitas de madera.
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Menú del día: 12€ (iva no inc) Restaurante Paladini Dcha: Carpaccio de salmón ¿Has visitado este restaurante? ¡Déjanos tu opinión en el espacio para comentarios! |
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Comentarios
Azucena C
Miércoles, 3 de Julio de 2019
Nos llevaron al interior de este restaurante con la escusa de que había aire acondicionado.Nos bajan a una bodega de techo bajo y olor nauseabundo. Mi hijo pequeño comenzó a dar arcadas...era una mezcla de lejía y vinagre.
Nos sientan en una mesa con dos sillas y sofá rinconera lleno de manchas. Mantel de plástico renegrido y roto. Nos dice el camarero por cierto bastante desagradable que había habido una despedida el día anterior. Me traen una caña con la copa bastante sucia y tras pedirle q la cambie me trae otra y me dice que el pintalabios no lo lava el lavavajillas. La comida sabía mal, la carne estaba vieja, hasta el flan tenía corteza.Los camareros estaban sucios y las miradas entre todos los comensales lo decían todo. Mi marido a las pocas horas comenzó a sentirse mal con dolor abdomen, vómitos y diarrea.Estuvo toda la noche en el baño en nuy mal estado. Por eso no entiendo como este tipo de restaurantes no tienen una inspección de sanidad y siguen aún abiertos.
Invitado
Miércoles, 27 de Junio de 2012
Para mí el peor restaurante en el que he comido en Salamanca. Nos pusieron una ensalada con unos trozos de queso manchego que parecían piedras y una pizza aún sin acabar de descongelar y con un tamaño ridículo, sin contar con innumerables manchas en el mantel y en las servilletas, no se lo recomiendo a nadie.
Angel
Sábado, 14 de Enero de 2012
Acabamos de cenar en este restaurante y ha sido muy desagradable en todos los sentidos, nada más bajar por las escaleras se percibe un olor rancio que te echa para atrás, el local está muy sucio, los camareros poco aseados y la comida con mala presentación. No volveremos nunca más y no se lo recomendamos a nadie.
Invitado
Lunes, 29 de Diciembre de 2008
Hemos comido hoy en este restaurante y he dedecir que nos han intentado estafar, paseabamos por la calle y vimos restaurante el churrasco con menú a 12.80 € bastante bueno, al entrar un hombre dice que no hay sitio y nos lleva al paladini que esta al lado pedimos el menu y nos llevan uno de 17 €, al quejarnos vemos a la camarera pedir el barato al responsable y este le dice ¡no le des a nadie el menú barato! al ver que yo le he escuchado y estaba mirando lo ha traido a regañadientes, encima de ser un sitio pequeño, de techos bajos y muy agobiante nos intentan meter el menú caro que era igual que el barato, ¡eran los mismos platos! No recomendamos este sitio a nadie, es pésimo.
Y cuando ya estabamos comiendo han venido otros chicos y han pedido el menú, directamente les han dado el de 17€ y mientras el camarero iba a por agua les he dicho que había un menú mas barato y les han dicho que ya solo había ese, mentira por que cuando ya acababamos de comer se han sentado unos señores en la mesa de al lado y les han dado el barato, imaginense la cara de estos chicos, ¡que verguenza! :( :(
Invitado
Sábado, 16 de Febrero de 2008
La verdad es que deja bastante que desear en cuanto a la elaboración de los platos, manchas en el mantel y las servilletas y, por encima de todo, es excesivamente caro.
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