Platos típicos que no pueden faltar en esta feria de abril
Viernes, 9 de Mayo de 2025
Claudia Poveda
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Desde el pescaíto frito hasta el rebujito, pasando por guisos tradicionales como el rabo de toro o refrescantes platos como el salmorejo, la gastronomía andaluza brilla con luz propia en cada caseta. Te contamos cuáles son los platos típicos que no pueden faltar en esta fiesta llena de sabor y tradición.
La Feria de Abril de Sevilla no solo es conocida por sus trajes de flamenca, el baile por sevillanas y las casetas iluminadas, sino también por su rica y variada gastronomía tradicional. Durante esta fiesta, que transforma la ciudad en un hervidero de alegría y color, la comida juega un papel protagonista. Degustar los platos típicos de la Feria es, sin duda, una forma de sumergirse de lleno en la cultura andaluza.
El arranque de la feria no se entiende sin el famoso "pescaíto frito", una ración de pescado rebozado y frito que suele incluir boquerones, cazón en adobo, puntillitas o calamares. Se sirve caliente, crujiente y generalmente acompañado de una caña de cerveza bien fría o una copa de manzanilla.
En cualquier caseta que se precie encontrarás un plato de jamón ibérico de bellota, cortado a cuchillo, junto con queso curado andaluz. Son opciones clásicas para compartir, abrir el apetito y acompañar una buena charla entre amigos.
La tortilla española, jugosa y elaborada con huevos, patatas y cebolla (según el gusto), también es habitual en las casetas. Además, los montaditos, pequeños bocadillos de lomo, chorizo, pringá o carne mechada, son un bocado rápido, sabroso y muy popular.
El marisco tiene también su espacio en la feria, especialmente las gambas cocidas, servidas frías con sal gorda. Otros mariscos como langostinos o cañaíllas pueden encontrarse en casetas más especializadas o familiares.
Una opción más caliente y con carácter es la de las gambas al ajillo, cocinadas en aceite de oliva con ajo y guindilla. Sabrosas, aromáticas y perfectas para mojar pan.
Cuando el calor aprieta, entran en escena dos platos fríos tradicionales:
Gazpacho andaluz: sopa fría elaborada con tomate, pimiento, pepino, ajo, pan y aceite de oliva. Refrescante y saludable.
Salmorejo cordobés: más espeso que el gazpacho y coronado con jamón y huevo duro picado. Una auténtica delicia de cuchara.
Uno de los platos más contundentes y tradicionales es el rabo de toro guisado, cocinado a fuego lento con vino tinto, verduras y especias. Su textura melosa y su sabor profundo lo convierten en un manjar de la cocina andaluza.
No es un plato, pero no se puede hablar de gastronomía ferial sin mencionar el rebujito, la bebida por excelencia de la Feria. Esta mezcla refrescante de manzanilla o fino con refresco de lima-limón se sirve con hielo y en jarra, ideal para combatir el calor y brindar al son de una sevillana.
Para cerrar con algo dulce, los buñuelos de feria son son un un dulce frito de masa, generalmente redondos y esponjosos, que se fríen en aceite. Son un clásico de la feria y se pueden encontrar en muchas casetasIdeales para acompañar con un café o una copita dulce.
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