Hoy se celebra La Fiesta del Cordero, la más importante del calendario musulmán

Los musulmanes tienen dos grandes celebraciones del Eid: el el Eid al-Fitr, y el Eid al-Adha. La primera se celebra justo al finalizar el mes del Ramadán y se conoce como 'dulce Eid' y la segunda aproximadamente 70 días después, se conoce como 'Eid salado' y la comida es sabrosa. Nos centraremos en la gastronomía de la segunda celebración.

Eid al-Adha, Celebración del Sacrificio o La Fiesta del Cordero es una conmemoración que se realiza justo al terminar la peregrinación hacia La Meca. En ella se realiza un sacrificio, normalmente de un cordero macho y mayor de seis meses, como acción de gracias a Dios por salvar la vida del hijo del profeta Abraham, Ismael. Este animal sacrificado se divide en tres partes: una parte para el dueño del mismo, otra para familiares y vecinos, y otra parte para los más necesitados, independientemente de su religión o nacionalidad.

Durante los tres días de celebración se come el animal sacrificado, acompañado de té o limonada, debido al alto contenido en grasa del animal y seguidamente se procede a quitar la piel, que posteriormente se cura y se utiliza como alfombra. Se cuelga el canal de cordero, de un gancho que ya forma parte de la decoración de la casa, se limpian concienzudamente y se preparan para el festín del primer día.

Se consumirá sobre todo como pinchos hechos a la brasa, o bien en tajines. Uno de los tajines más conocidos es el m'rouzia, un tajin dulce cuyo protagonismo lo comparten la carne de cordero y el ras el hanout, la mezcla de especias 100% marroquí. Es tal la importancia de la m'rouzia que se utiliza un ras el hanout exclusivo para ésta receta. 

Familia musulmana disfrutando de una comida en La Fiesta del Cordero

El primer día se realiza el sacrificio, con el animal mirando hacia La Meca y el festejo gastronómico lo inaugura el boulfaf, un pincho de hígado recubierto de una tira de grasa. Típicamente se van haciendo y comiendo al mismo tiempo, por lo que nunca da tiempo a que se enfríen las brochetas. Por la tarde se quemará la cabeza de cordero y se guisará o bien se cocerá al vapor, de esta manera, lo más perecedero, las vísceras, quedarán liquidadas el primer día.

El despiece del animal se realiza el segundo día de fiesta, al haber estado en reposo, es más fácil trabajar con la carne. La cola o Kadid se pone a secar al sol y se guarda, la parte más grasa se funde produciendo Khlie -la grasa con la que se envuelve el boulfaf- y el resto se utiliza para la preparación de entrecots y otros platos con carne. Una vez que se ha hecho el reparto se guarda en platos, se cubren con trapos y se dejan al sol para que conserven el calor. Para terminar este segundo día se cocinan las patas del animal, normalmente con guisantes, y por último, la paletilla del chivo estofada, o bien la carne hecha al vapor, añadiendo mantequilla, sal y comino en el momento de servirlos en el plato.

Todas estas comidas se toman normalmente tras las oraciones ad duhr (medio día) e isha (de la noche), de manera que estos días las oraciones sustituyen al reloj en la vida cotidiana. Esta tradición alimenticia se rompe el tercer y último día cuando cada familia cocina en función de su gusto. 

¡Desde HosteleriaSalamanca deseamos que todos los musulmanes pasen estos días en felicidad y armonía, rodeado de su familia y amigos! como se dice en estos casos, que su casa prospere, sus deseos se cumplan y todas sus esperanzas y plegarias sean escuchadas por Alá.

¡Feliz Eid al-Adha!

Maamoul, bollos especiales que se rellenan de dátiles, pistachos o nueces