Gastronomía de vigilia
Miércoles, 18 de Febrero de 2015
Hosteleriasalamanca.es / Por Eva González
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Hoy 18 de febrero es Miércoles de Ceniza. Tras un carnaval festivo -y carnívoro- se entierra la sardina y da comienzo la Cuaresma, los cuarenta días de reflexión y penitencia que se extienden hasta el Domingo de Ramos y la posterior Semana Santa, semanas de "ayuno" sobrellevado gracias a los platos de vigilia que ofertan muchos restaurantes salmantinos. ¡Te los mostramos!
La Cuaresma es un período de recogimiento, que recuerda los cuarenta días que pasó Jesucristo en el desierto, y que hasta no hace demasiado tiempo influía de manera notoria en el ocio, el atuendo, la comida y en definitiva la vida diaria de los católicos. Acudir diariamente a la iglesia, el recato, la confesión, el ayuno diario y la vigilia de los viernes eran preceptos que nuestros mayores respetaban con estricta observancia. Sin embargo, estas tradiciones se fueron relajando durante las últimas décadas del siglo XX, debido a los movimientos migratorios, al boom turístico en España, la llegada de la Democracia y los cambios sociales que ésta supuso. Imagen: La Cuaresma se representa como una anciana con 7 piernas, uno por cada semana, y un cesto de verdura y bacalao en la mano. El Museo del Comercio regala a durante esta semana, el dibujo recortable de una cuaresmera, representación simbólica que antaño se colgaba en los comercios. |
No todas las tradiciones cuaresmales se perdieron, en muchos hogares y restaurantes se conserva la vigilia de los viernes, elaborando platos acorde con las restricciones alimentarias. Principalmente el reclamo son los potajes y las elaboraciones con bacalao, de los pocos pescados que, gracias al salazón, llegaban al interior de la España de la escasez y la posguerra.
Las torrijas, ya presentes en las minutas dulces durante todo el año, en esta época son las estrellas. En algunos establecimientos se reproduce la receta tradicional intacta, sin embargo, en la mayoría, las torrijas adoptan nuevos ingredientes y presentaciones y se acompañan de almíbares, frutas exóticas, cremas y helados, convirtiendo un dulce humilde, de “aprovechamiento de las sobras”, en una auténtica delicia.
Pestiños, sacatrapos, leche frita, rosquillas fritas y floretas (todos ellos en venta en Confitería Santa Lucía), son también dulces habituales de esta época. Todos tienen el común la utilización de ingredientes muy sencillos y asequibles: pan duro, leche y huevos principalmente, pero que dan lugar a bocados energéticos que ayudaban a sobrellevar el estricto ayuno impuesto.
El viernes 20, será el primer viernes de vigilia y desde ese día podéis descubrir platos cuaresmales en numerosos restaurantes salmantinos, ¡os dejamos algunos ejemplos!
En el Rio de la Plata elaboran un potaje de bacalao, con garbanzos de Fuentesaúco, judías verdes y ¡rellenitos!, además de Bacalao al horno con tomate y Torrijas hechas como las preparaba, a mediados del siglo pasado, la madre de Pauli, actual cocinera y propietaria.
En el restaurante Pucela recomiendan su Bacalao al horno con pisto, el Bacalao al pil pil de tomate y su postre fetiche: la Torrija con helado casero de piñones, un dulce de pan de hogaza de Arapiles - resposado varios días- y bañado con azúcar glass.
De izda a dcha: pestiños y torrijas de nuestro recetario, en el centro: potaje con judías verdes y rellenitos del Río de la Plata y Bacalao al pil pil de tomate del Pucela |
El Mesón de Gonzalo también se apunta a los viernes de Cuaresma con el potaje tradicional -que en este restaurante no lleva arroz- y con una actualizada presentación. De postre, su deliciosa Torrija caramelizada, acompañada de helado casero de yogur búlgaro.
Casa Paca los viernes ofrece potaje de vigilia, que también puede comandarse en formato tapa a pie de barra. De segundo, un Bacalao a la riojana, un clásico que forma parte de su carta a lo largo de todo el año, y de postre, sus melosas torrijas de leche y vino.
El restaurante Rivas (Vega de Tirados) ya ha comenzado a preparar sus clásicos escabeches, entre ellos el de chicharros, que forma parte de una de sus ensaladas de invierno. También recomendable su guiso de bacalao con patatas, su potaje los viernes (con buen bacalao y espinacas) y sus torrijas.
En Don Mauro, los viernes de Cuaresma ofrecen un menú ejecutivo compuesto por Arroz negro de calamares y Bacalao al pil pil. De golosina: una tarta de queso con albaricoque.
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