Viñas del Cámbrico presenta el exclusivo Calabrés 2008

La Bodega Viñas del Cámbrico, recientemente ganadora en la categoría "Vino y enología" de los Premios Hosteleriasalamanca.es, y perteneciente a la DOP Sierra de Salamanca, presentó sus vinos en El Casino de Salamanca a más de un centenar de hosteleros y aficionados. La estrella de la noche fue el nuevo Cámbrico Calabrés 2008, del que sólo existen 150 botellas magnum.

Fernando Maíllo y Alberto Martín, propietario y enólogo de la bodega respectivamente, llevan trabajando en la recuperación de esta uva desde el año 2002, cuando se encontraron con 16 cepas de calabrés entre sus viñedos. Tras muchos esfuerzos, injertos, y trabajo en la oscuridad, sacan a la luz un vino marcado por la elegancia, muy sutil en nariz, y con una boca muy larga. Un vino diferente, para una bodega diferente y para gente que busca salirse del mercado.

Fernando Maíllo, propietario de Bodegas Cámbrico intercambia impresiones con el historiador Conrad Kent

“Es un vino muy especial. Hemos tenido que trabajar mucho para recuperar una variedad que estaba casi extinguida”, asegura Fernando Maíllo, que está muy satisfecho con la respuesta que ha tenido este vino entre los consumidores. Cada botella de Magnum de Calabrés 2008 cuesta 120 euros.

Los responsables de Viñas del Cámbrico explicaron a los asistentes todo el proceso de control que tienen sus viñedos, que cultivan en ecológico. También comentaron al público el trabajo que se realiza en la bodega, desde la esmerada selección manual que se realiza de la uva, la fermentación y volteos por gravedad, a la fermentación, en barricas de 300 litros renovadas cada año, y el tiempo de reposo en botellas magnum para salvaguardar mejor los aromas y características de esta uva tan peculiar.

Un proceso que puede ser conocido sobre el terreno por aquellas personas interesadas, puesto que Viñas del Cámbrico también se ha apuntado al enoturismo, organizando una excursión por los viñedos y la bodega, llena de atractivo visual, pero sobre todo de conocimiento sobre la forma de cultivar los viñedos en la Sierra de Salamanca, y la peculiar elaboración de Alberto y Fernando.

La Calabrés es un clon de la uva Garnacha, una variedad mucho más extendida por España. Sin embargo, las peculiaridades medioambientales de la sierra salmantina han provocado una evolución distinta en ella, dotándola de unas características distintas, al igual que ocurrió con la tempranillo.

El Cámbrico Calabrés se caracteriza por mantener todos los aromas de la uva, es un vino sedoso y muy prolongado en boca. Al igual que sus hermanos Cámbrico, Rufete y Tempranillo, sorprende al consumidor cuando lo prueba por ser distinto a cualquier otro vino del mercado. Esa exclusividad, conseguida tras mucho trabajo y esfuerzo del equipo, convierte a los Cámbricos en un objeto de deseo para los grandes aficionados al vino, y es lo que distinguen los críticos de las mejores guías internacionales.

La cita también sirvió para presentar el resto de los vinos que elabora Viñas del Cámbrico en Villanueva del Conde: Cámbrico Rufete, Cámbrico Tempranillo, el 575 Uvas y el Viñas del Cámbrico. Los dos últimos son vinos más jóvenes y donde se mezclan rufete, uva autóctona de la sierra de Salamanca, tempranillo y calabrés.

Por otra parte, además de degustar los vinos, los asistentes probaron el jamón de Calama, de Mogarraz, y el pan de la Tahona de Salamanca.