Tarta Red Velvet, la reina de San Valentín
Lunes, 14 de Febrero de 2022
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La Tarta Red Velvet -que en castellano significa Terciopelo rojo- es un delicioso pastel esponjoso, delicado y con un llamativo color rojizo. Sin duda, una gran apuesta para sorprender en San Valentín. ¡Os contamos todo sobre este clásico de la repostería americana!
En Estados Unidos una tarta es la reina: el Pastel Red Velvet, caracterizado por su textura aterciopelada, su esponjosidad y su tono rojizo. Todo ello hace que esta tarta resulte ideal para prepararla con motivo de San Valentín, que tendrá lugar el próximo viernes 14 de febrero, pues no sólo sorprenderá por su original apariencia sino también por su textura y sabor. ¡Puro romanticismo!.
Cuenta la leyenda que en los años cincuenta, una clienta se hospedó en el Hotel Waldorf Astoria en Nueva York donde probó este espectacular postre y pidió la receta. Los responsables del Hotel accedieron pero consideraron justo cobrar por dicha revelación, alrededor de unos 300 dólares (una cantidad bastante desorbitada para esa época). Parece ser que ante esta situación y como venganza, la clienta decidió dar a conocer el proceso de elaboración a todos sus familiares y amigos. De este modo, la Tarta Red Velvet ha llegado a nuestros días y hemos podido conocer su peculiar receta, que os detallamos a continuación.
Tarta Red Velvet clásica
Ingredientes para el bizcocho:
Ingredientes para el frosting y el relleno de queso
Elaboración paso a paso:
Precalienta el horno a 180 ºC. Coge tu molde con forma de corazón, como estos, y corta un trozo de papel sulfurizado lo más similar a esa forma, ponlo en la base del molde y engrásalo con un poco de mantequilla.
Pon la leche, el zumo de limón y el colorante en un bol (buttermilk) y deja que repose unos diez minutos. en otro bol mezcla la harina, la levadura, la sal y el cacao.
Bate la mantequilla con el azúcar y cuando esté bien integrado añade los huevos sin parar de batir, después ve añadiendo los ingredientes secos tamizados(harina, levadura, sal y cacao). Cuando se hayan integrado bien añade la mezcla de colorante, leche y limón y la vainilla y vuelve a batir hasta conseguir una textura fina y homogénea. Finalmente mezcla el vinagre de manzana y el bicarbonato en otro bol y añádelos a la anterior preparación. Vuelve a mezclar bien hasta que todos los ingredientes queden bien incorporados.
Hornea durante 55 minutos a 180 grados, comprueba que el bizcocho esté bien cocinado, y cuando esté listo sácalo y déjalo enfriar encima de una rejilla. Cuando esté frío corta el bizcocho horizontalmente en tres partes del mismo grosor.
Prepara el relleno batiendo los tres ingredientes que lo componen (mantequilla, queso crema y azúcar glas) y la cucharita de colorante rojo -que lo dejará de color rosita- hasta que se hayan mezclado bien. Rellena generosamente cada capa del bizcocho con esta crema y cubre los laterales, todo el contorno y la parte superior con una espatula para que quede muy bien trabajado.
Puedes decorar la tarta de múltiples formas, con flores como en la imagen anterior, con frambuesas, guindas e incluso puedes colocarle encima algunas tarjetas decorativas para San Valentín personalizadas con un sugerente mensaje en su interior.
¡Feliz Día de los Enamorados!.
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