Reportajes : Temáticos

El Laboratorio del Terror, una terrorífica idea para Halloween

La sala de eventos Music Factory ofrece a los salmantinos una propuesta diferente para disfrutar de Halloween. Consiste en adentrarse en el espeluznante Laboratorio del Terror donde celebrarán conjuros, una queimada con degustación y muchas más sorpresas… ¡Acercaos, lo pasaréis de miedo!

¿Os atrevéis a entrar en el Laboratorio del Terror? Esta es la terrorífica apuesta de la sala de eventosMusic Factory para celebrar Halloween desde el viernes 28 hasta el lunes 31 de noviembre. Así, los asistentes se adentrarán en un mundo espeluznante donde habrá tiempo para realizar un conjuro y recrear una queimada, tal y como se hacía en la antigüedad. Posteriormente habrá degustación de la bebida llevada a cabo para todos los presentes.

Por otra parte, la sala de eventos, que contará con una decoración preparada especialmente para la ocasión, propone a los salmantinos desempolvar sus disfraces más terroríficos para disfrutar de la noche como se merecen. Precisamente, los camareros irán vestidos con una indumentaria que no dejará indiferente a nadie: enfermeros gore.

Sobre Music Factory 

La sala de eventos Music Factory nació en 2011 de la mano de Pedro San Ricardo, quien se introdujo en el mundo de la hostelería cuando apenas contaba con 15 años. La idea surgió por las ganas de innovar y de distinguirse del resto de la oferta salmantina, puesto que en esos años la ciudad se estaba quedando un poco parada. “Creo que nuestra idea de renovar funcionó”, asegura Pedro, puesto que cada semana organizan un amplio abanico de actividades para todos los públicos.

= result) result = value; }); return result; }" data-min="function (iterator, context) { iterator = iterator ? iterator.bind(context) : Prototype.K; var result; this.each(function(value, index) { value = iterator(value, index); if (result == null || value < result) result = value; }); return result; }" data-partition="function (iterator, context) { iterator = iterator ? iterator.bind(context) : Prototype.K; var trues = [], falses = []; this.each(function(value, index) { (iterator(value, index) ? trues : falses).push(value); }); return [trues, falses]; }" data-pluck="function (property) { var results = []; this.each(function(value) { results.push(value[property]); }); return results; }" data-reject="function (iterator, context) { iterator = iterator.bind(context); var results = []; this.each(function(value, index) { if (!iterator(value, index)) results.push(value); }); return results; }" data-sortby="function (iterator, context) { iterator = iterator.bind(context); return this.map(function(value, index) { return {value: value, criteria: iterator(value, index)}; }).sort(function(left, right) { var a = left.criteria, b = right.criteria; return a < b ? -1 : a > b ? 1 : 0; }).pluck('value'); }" data-toarray="function () { return [].concat(this); }" data-zip="function () { var iterator = Prototype.K, args = $A(arguments); if (Object.isFunction(args.last())) iterator = args.pop(); var collections = [this].concat(args).map($A); return this.map(function(value, index) { return iterator(collections.pluck(index)); }); }" data-size="function () { return this.length; }" data-inspect="function () { return '[' + this.map(Object.inspect).join(', ') + ']'; }" data-select="function (iterator, context) { iterator = iterator.bind(context); var results = []; this.each(function(value, index) { if (iterator(value, index)) results.push(value); }); return results; }" data-member="function (object) { if (Object.isFunction(this.indexOf)) if (this.indexOf(object) != -1) return true; var found = false; this.each(function(value) { if (value == object) { found = true; throw $break; } }); return found; }" data-_reverse="function reverse() { [native code]}" data-_each="function forEach() { [native code]}" data-clear="function () { this.length = 0; return this; }" data-first="function () { return this[0]; }" data-last="function () { return this[this.length - 1]; }" data-compact="function () { return this.select(function(value) { return value != null; }); }" data-flatten="function () { return this.inject([], function(array, value) { return array.concat(Object.isArray(value) ? value.flatten() : [value]); }); }" data-without="function () { var values = $A(arguments); return this.select(function(value) { return !values.include(value); }); }" data-uniq="function (sorted) { return this.inject([], function(array, value, index) { if (0 == index || (sorted ? array.last() != value : !array.include(value))) array.push(value); return array; }); }" data-intersect="function (array) { return this.uniq().findAll(function(item) { return array.detect(function(value) { return item === value }); }); }" data-clone="function () { return [].concat(this); }" data-tojson="function () { var results = []; this.each(function(object) { var value = Object.toJSON(object); if (!Object.isUndefined(value)) results.push(value); }); return '[' + results.join(', ') + ']'; }" style="width: 100%;">Pedro San Ricardo y Coral Moro.

Hoy en día la sala supone una iniciativa de ocio de calidad que se ve reflejada en todos los sentidos: el servicio, la manera de poner las copas, ¡e incluso en la vajilla que se usa! Este servicio y producto de calidad han hecho que la aceptación por parte del público sea buena, ya que demandan espectáculos que no pueden ver en otros sitios. A pesar de que intentan contemplar un abanico de música de todo tipo, a primera hora de la noche pinchan música española e internacional de los 80’ y 90’s, por lo que se están especializando en el público de más de 30 años.

Las copas preparadas y los cócteles son la especialidad del Music Factory, pero eso sí, las copas preparadas tienen la misma calidad a cualquier hora: “No porque haya más jaleo se va a tratar peor al cliente”. ¿Qué pedir entre toda la oferta? Pedro asegura que su mojito gusta mucho a la gente, puesto que aunque lleva los ingredientes tradicionales, destaca por su manera de hacerlo.

Music Factory Salamanca
Plaza de Monterrey, 7

Compártelo

Coméntalo

Comentar el artículo