Alimento básico en nuestra dieta, saludable como pocos y, además, económico. Hablamos del pan. Del buen pan. El pan de verdad. El elaborado día a día en el obrador, con todo el mimo y paciencia que requiere la masa.
En la época actual, el principal sustento de la humanidad se ha convertido en un producto gourmet. Panes con semillas, distintos tipos de harina, de tomate,
aceitunas, especias,
con pasas… Encontramos infinidad de variedades en las panaderías, que podemos aprovechar para redondear nuestros menús. Aunque todo depende en gran medida de los gustos de cada persona, ¿por qué no combinar un buen plato con la variedad de pan que mejor casa con sus sabores y texturas,
al igual que hacemos con los vinos?
No hay que ser un experto gastrónomo ni el más sibarita para darse cuenta de que una tapa de foie sobre un trozo de pan de molde no funciona. Hoy queremos aconsejaros acerca de las variedades de pan que mejor combinan con los sabores navideños más habituales.
Jamón, embutidos… Para acompañar los aperitivos más ibéricos, convienen los crujientes
colines,
picos o
tostas elaborados con aceite de oliva, ya que ayudarán a contrarrestar la salinidad de estos alimentos. Si servimos quesos curados, el mejor acompañamiento suelen ser los panes rústicos, caracterizados por una apariencia artesanal. El
pan con pasas y nueces es ideal para aquellos entrantes en los que predominen quesos de sabor intenso, como el de cabra o el azul, así como para servir junto a patés y foies. Los sabores marinos de un plato de ahumados se complementan a la perfección con
panes de semillas o
chapata.
Barra multicereal. |
Si pasamos a los platos principales, la sutileza del pescado armoniza muy bien con el pan de tomate, por su crujiente corteza y aroma ligeramente especiado, así como con todos aquellos que posean una miga ligera y aireada, como la barra gallega, que tiene además una muy crujiente corteza que aporta textura a cada bocado. Por otra parte, si estas navidades habéis optado por asados de cordero, os recomendamos completarlos con una hogaza castellana o pan candeal, para que contrarreste con la carne grasa del cordero. Si sois más del tradicional pavo relleno al horno, optad por una barra multigrano, es decir, por aquella con una esponjosa miga con semillas en su interior y una crujiente corteza tostada. Será el tipo de pan que mejor casará con una suave carne como la del pavo.
Panes integrales |
Por último, si hemos incluido algún plato con verduras en nuestro menú de Navidad, a la hora de elegir el pan tendremos que tener en cuenta que no debe tener un sabor muy destacado, ya que de lo contrario enmascararía el sabor del plato. En este caso, las barras integrales y el mollete resultan perfectos.