Una ruta por la Feria de Día

Fuente: Hosteleriasalamanca.es 
Por Eva González

hosteleriasalamanca.es les ha preparado un recorrido "in situ" por algunas de las noventa casetas repartidas por toda la ciudad, con precios, pinchos ofertados, camareros estresados y sobre todo mucho mucho ambiente festivo

La Feria de Día ha sido durante sus tres años de vida una de las actividades estrella de las Ferias y Fiestas de Salamanca. La Apertura Oficial de la misma tuvo lugar el jueves 7 de septiembre, aunque con un pelín de retraso debido a problemillas con la instalación eléctrica y falta de tiempo para ultimar preparativos.

Camareros del Rúa Mayor ansiosos por empezar la jornada

Primeros clientes que se acercaban a la Feria de Dia

Sin embargo, apenas desapareció el sol, miles de salmantinos ávidos de disfrutar del buen tapeo que tanto nos caracteriza, se lanzaron en manada a las calles inundando cada rincón de la ciudad de fiesta y alegría desbordante. Camareros especialmente contratados para el evento se preparaban para comenzar una larga y agitada jornada...

Comenzamos nuestra particular ruta en la Caseta de Vinodiario ubicada en el Parque de Colón, el Pincho de la Feria elaborado especialmente para la ocasión, es un curioso Burrito relleno de chichas de cerdo ibérico con una reducción de Pedro Ximénez. Una delicia para el paladar que puedes acompañar de un Almaraz si hablamos de un Rioja Joven, o en el caso de que prefieras un D.O. Ribera del Duero, de un Buen Miñón.

Burrito de chichas ibéricas

Todo por el precio de 1’50€. También en esta misma plaza puedes visitar las Casetas de al menos otros nueve establecimientos, entre los que se encuentran El Charro , con un pincho a base de morucha o Las Cavas del Champán con unos originales Lomitos a la naranja.

Continuamos la noche festiva dirigiéndonos a la Caseta del Bar Rúa Mayor, próxima a esta céntrica calle. Los camareros que derrochaban alegría y buen humor, ofrecen dos opciones, ambas igual de apetecibles: por un lado una deliciosa tosta con aceite de oliva, jamón ibérico y tomate natural, y por otro un montadito de lomo con una secretísima salsa de Ali-Oli de la que celosamente guardan la receta. Con ellos nos recomiendan tomarnos una caña fresquita o un Rioja Sonsierra.

Montadito de lomo con Ali-Oli

Mientras seguimos paseando no pasa desapercibida la originalidad de algunas de las Casetas, como la de La Taberna Celta, con fotografías enormes y una gran manzana verde luminosa que corona su cima, o la de la Cafetería Bambú cuya estructura misma es un toro de considerables dimensiones.

Decenas y decenas de casetas siguen apareciendo en cada callejuela, en cada pequeña plaza, en cada rincón del casco histórico... Vamos a parar a la Plaza Santa Eulalia donde La Santa ha instalado su “chiringuito”. El lugar ya está abarrotado de gente, los camareros apenas disponen de tiempo para atender a la hambrienta clientela.

Saúl de La Santa con un reclamado plato de cruceta

La cruceta ibérica, que es el Pincho de la Feria, se hace vuelta y vuelta en la plancha y después de aliña con un machao de ajo, tomillo, laurel, aceite y vinagre (aquí parece que no tienen problemas en revelarnos los ingredientes pormenorizados). También se pueden degustar jugosos montaditos de lomo asado con especias y panceta a la plancha. Todo ello acompañado de un equilibrado y juvenil Camparrón de Toro.

Entre pincho y pincho se intercambiaron opiniones e ideas con los diferentes responsables y camareros de las Casetas. Las expectativas son muy buenas, parece que la nueva hora de cierre - este año obligatoria a las 12:30- se acoge positivamente y lo único que piden es un poco más de limpieza y organización al Ayuntamiento, quizás unos baños públicos no serían una mala idea...

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